En Senegal, estudiar es difícil. Las escuelas están alejadas de los pueblos y hay que caminar hasta 12 kilometros para llegar a ellas. Es algo muy cansado, sobretodo si lo tienes que hacer cada día.
BICICLETAS SIN FRONTERAS pretende mejorar la calidad de vida de los alumnos que se encuentran en situaciones menos favorecidas usando la bicicleta como herramienta de integración y de igualdad de oportunidades.
Bajo el lema: "No damos bicicletas, cambiamos vidas" quieren combatir no solo el absentismo escolar si no mejorar su rendimiento, además de aportar más felicidad, más futuro y más oportunidades a los niños y niñas que reciben las bicis. También salen beneficiados al obtener más tiempo para estudiar, para jugar y para crecer.